Pues me volvieron a asaltar...

Y creo que definitivamente este es el asalto mas extraño en mi experiencia.

Esperando yo a cierta persona que no llegó y leyendo un libro para matar el tiempo mientras esperaba, sin darme cuenta se me acerco un wey al que la pinta, pero sobre todo el olor (algo así como thinner o pintura) delataban como un pequeño vándalo, el primer paso, como todo ladrón que se respete haría, fue darme la buenas tardes, estrechar mi mano y después entrar en materia intimidandome.

Ladrón: Bueno banda, sabemos como te llamas y donde vives, y mi cuate me esta esperando cruzando la calle así que si no me das 1oo varos vas a valer madres, solo te pido que me si...

Yo: MMM... pues elegiste mal carnal* (nótese las palabras que se incluyen para hacerlo sentir en confianza y como método de supervivencia), traigo como quince pesos, pero te puedo dar 10. (saco 7 pesos), te sirven?

Ladrón Buena Onda (y algo confundido): -Nel, nel, dame eso...- agarra una moneda de dos pesos, se queda pensativo y pregunta -¿De qué trata tu libro?- lo mira fijamente -Da... Da... David... Cop... Cap... Coppref... ¿De qué trata?-

Yo: -David Copperfield- (Intentando explicar sencillamente de que trata) -Pues es un wey que vive en Inglaterra y narra su vida y... (Riiiiiing) (Riiiiiing) esteeee (mmta madre... lo que me faltaba), me esperas tantito me están hablando.-

Ladrón con intereses culturales: -Claro carnalito.-

Contesté la llamada con la intención de huir de ahí lo antes posible llevándome intactas mi integridad, mi celular y casi todo mi dinero; la llamada, intrascendente y de la cual no vale la pena ni escribir estas palabras, fue contestada a pocos metros de ahí mientras obsevaba como mi asaltante favorito se subía a un microbús.

Realmente solo me asuste al principio de la conversación, de ahí en fuera lo tomé muy bien.

Me pidió 100 pesos, le ofrecí 10, saque 7 y se llevó 2; ¿Qué es esto si no un gran ejemplo de negociación?

¡Pos Hablando se entiende la gente!